*Caral*


  • Ubicación
Esta situado en el valle de Supe, a 200
kilometros al Norte de Lima
  • Antigüedad
Tiene 5.000 años de antigüedad
  • Población
Albergó de 1.000 a 3.000 habitantes
  • Extensión
66 hectareas, divididas en dos zonas,
una central y la otra periférica.
  • Patrimonio a la Humanidad
La Ciudad Sagrada de Caral es la representante más destacada por su         antigüedad, complejidad arquitectónica con edificios piramidales,  plazas, su diseño y la extensión urbana de esta civilización peruana, la más antigua del continente americano. De esta manera, Caral se añade a los otros 10 sitios turísticos ya reconocidos como Patrimonio de la Humanidad en el Perú.
  • Etimología
En los años 70 del siglo XX el lingüista Alfredo Torero publicó que el idioma quechua habría tenido su origen en los valles de Supe, Fortaleza y Pativilca. Esta afirmación la hizo después de estudiar la toponimia (nombres de los lugares) de los tres valles. Caral, nombre del centro poblado cercano al sitio arqueológico, aparece mencionado en los procesos de idolatrías del siglo XVII en Cajatambo. Es posible que fuera un nombre quechua. Sobre su significado no hay acuerdo, aunque algunos lingüistas han propuesto que significa "fibra" o "junco".
  • Descubrimiento
    arqueológico 
En 1994, Ruth Shady recorrió el valle de Supe e identificó 18 sitios con las mismas características arquitectónicas, entre los cuales se encontraban los 4 conocidos como Chupacigarro Grande, Chupacigarro Chico, Chupacigarro Centro y Chupacigarro Oeste. Para diferenciarlos Shady los denominó, Caral, Chupacigarro, Miraya y Lurihuasi. Caral, Miraya y Lurihuasi son los nombres quechua de los poblados más cercanos a los sitios. Chupacigarro es el nombre español de un ave del lugar.
  • Ciudad Sagrada
Se le ha llamado también ciudad sagrada, ya que es una época en que por primera vez, que se sepa hasta ahora, las sociedades peruanas tuvieron un gobierno central, se establece el estado y utiliza la religión como medio de afirmación. Todo lo que se ha excavado en la ciudad está impregnado de religiosidad. Hay muchos fogones construidos para ofrendas. Hay señales de posibles rituales en cada lugar. No solamente en las áreas de espacio público o en los templos sino incluso en las casas.